Pero el verdadero centro de este ensayo reside en la refutación del paradigma tecnocrático como fórmula de felicidad, y en la crítica a la teoría económica que reduce toda relación a una transacción, todo encuentro a la medición de la capacidad recíproca de consumo, todo diálogo a un monólogo, todo silencio a un vacío en lugar de a una plenitud, todo tiempo dedicado a la escucha a un tiempo perdido en lugar de ganado, todo diálogo a un riesgo a evitar. Paolo Ruffini